Andenes del barrio Teusaquillo reverdecen con nuevos árboles

El Jardín Botánico de Bogotá (JBB) tiene proyectado plantar 35 árboles de porte medio y bajo en varios andenes de este barrio tradicional del centro de la ciudad.
20 líderes ambientales, funcionarios de la Alcaldía Local de Teusaquillo y comunidad, ayudaron a plantar los primeros nueve árboles de tres especies.
Algunos de los individuos arbóreos fueron bautizados en homenaje a personas que fallecieron recientemente. Nueva crónica #BogotáReverdece.
La historia de Teusaquillo, una localidad del centro de la ciudad con una extensión de 1.421 hectáreas y 33 barrios, se remonta a la época prehispánica. Los muiscas, indígenas pacíficos que veneraban el agua, fueron sus primeros pobladores.
Según las crónicas de antaño, el zipa de Bacatá, uno de los gobernantes muiscas, se trasladaba a diferentes lugares y llegaba a lo que hoy es Bogotá, en los alrededores de Teusaquillo. Teusacá, vocablo chibcha que al parecer es su diminutivo, significa cercado prestado.
Cuando los españoles conquistaron las zonas de la sabana de Bogotá, este pueblo indígena fue sometido, saqueado y acorralado por el yugo europeo, un accionar que prácticamente lo hizo desaparecer del territorio.
Bogotá comenzó a crecer como ciudad durante el siglo XX. Hacia la década de 1920, Teusaquillo empezó a constituirse como un núcleo de residencia de las clases altas y se convirtió en un ícono del urbanismo.
“En 1927, Teusaquillo fue el sector residencial más elegante de la ciudad, donde se consolidaron las mejores propuestas arquitectónicas del estilo inglés. Marcó una época importante en el urbanismo y la arquitectura capitalina”, revela la Alcaldía Local de Teusaquillo en su página web.
Durante la década de 1950 fue construída una de sus principales joyas: el Park Way, un cordón arbóreo y cultural de 800 metros lineales ubicado en el barrio La Soledad. Este sitio bohemio es visitado a diario por miles de ciudadanos amantes de la naturaleza y el arte.
Con el paso de los años, la arquitectura tradicional de la localidad empezó a palidecer con la llegada de la modernidad, representada en altos edificios de apartamentos, restaurantes y establecimientos comerciales.
Sin embargo, uno de sus sectores conserva las huellas del pasado. Se trata del barrio Teusaquillo, un sitio residencial ubicado cerca del Park Way donde sobreviven varias casas con las fachadas de antaño intactas.
Crece el verde
El sitio más verde de este barrio es el parque Teusaquillo, ubicado entre las calles 34 y 35 y carreras 17 y 16. Este rectángulo alberga más de 300 árboles de especies como pino ciprés, urapán, sangregado, palma yuca, cajeto, falso pimiento, nogal, eugenia, cerezo y siete cueros.
Los colibríes, abejas y otros polinizadores obtienen alimento de las flores y frutos de los jardines del parque, un lugar donde el cemento solo se ve representado por una cancha de baloncesto y microfútbol, senderos enladrillados, un CAI y dos monumentos religiosos.
Beatriz León, quien vive en una casa esquinera de la calle 34 con carrera 17, es la guardiana del emblemático parque. Lleva décadas luchando por mantener en pie los árboles y jardines, muchos de los cuales ella misma ha plantado, y cuidar la biodiversidad.
El propósito de vida de esta líder ambiental es que el verde se imponga en todo el parque y sus zonas aledañas, como es el caso de los andenes, ya que lucen cada vez más grises por las rampas que permiten el ingreso de los carros a los parqueaderos de las viviendas.
Luego de una verificación en campo por las calles del barrio Teusaquillo, el Jardín Botánico de Bogotá (JBB) evidenció que varios andenes pueden recibir nuevos árboles de porte medio y bajo, una noticia que le aceleró el corazón a la ciudadana.
“Durante todo noviembre vamos a plantar 35 árboles en varios andenes del barrio. El objetivo es que estos sitios recuperen su aspecto original, es decir con coberturas arbóreas y arbustivas”, informó Laura García, ingeniera encargada del arbolado joven de la localidad de Teusaquillo.
Beatriz le pidió al JBB que la invitara a las plantaciones en los andenes, al igual que a otros líderes ambientales de la localidad como Luis Klein, quien también ha dedicado su vida a reverdecer la zona donde vive.
“Luis aceptó encantado la invitación porque es uno de los ciudadanos que más trabaja por el cuidado de los árboles. Además de participar nos donó la tierra abonada para hacer las plantaciones”, informó Yenny Rosas, profesional social del JBB.
Primera plantación en andenes
El pasado jueves 3 de noviembre, el Jardín Botánico convocó a la comunidad para que participara en la primera plantación de árboles de porte medio y bajo en los andenes de la calle 35 con carrera 16.
“Evidenciamos que en estos andenes hay sitios para plantar nueve árboles. Escogimos tres especies: chicalá rosado, guayacán de Manizales y grosello; nuestros operarios se encargaron de abrir los huecos y recoger la tierra que Luis nos donó”, manifestó García.
Además de Beatriz, Luis y Consuelo Sánchez, líder ambiental del Park Way, para esta plantación se invitó a funcionarios de la Alcaldía Local de Teusaquillo, comunidad del sector y Patricia Aparicio, una habitante de Chapinero que anhelaba vivir la experiencia de plantar.
“Patricia nos escribió un correo manifestando que quería participar en alguna de nuestras plantaciones. Aunque no vive en la localidad de Teusaquillo, ella aceptó encantada ayudarnos en la actividad de los andenes”, indicó Rosas.
El parque Teusaquillo fue el punto de encuentro para la plantación, donde llegaron más de 20 personas. “Nos citaron a las nueve de la mañana, pero yo llegué antes porque estaba muy emocionada: era la primera vez que iba a plantar un árbol”, dijo Patricia.
Los líderes ambientales de Teusaquillo, quienes ya perdieron la cuenta de la cantidad de árboles que han plantado, dejaron que Patricia, los funcionarios de la Alcaldía Local y otros ciudadanos ayudaran a plantar los nueve árboles en los andenes.
“La señora Beatriz y los profesionales del JBB me guiaron. Lo primero fue retirar la bolsa de plástico donde está el pan de tierra, es decir las raíces del árbol, y luego aplicar un hidroretenedor en el hoyo”, afirmó esta ciudadana que plantó tres árboles.
Varios ciudadanos decidieron rendirle un homenaje a los familiares que han fallecido recientemente. Luego de pronunciar pequeñas oraciones, escribieron sus nombres en los tutores de madera que les darán estabilidad a los árboles mientras crecen.
“Fue una actividad muy bonita y llena de sentimientos. Escuchar las historias de los líderes ambientales de Teusaquillo me motivó más para seguir participando en las jornadas de plantación del JBB”, puntualizó Patricia.
Los otros 26 árboles que serán plantados en varios andenes del barrio Teusaquillo, también contarán con la participación de la comunidad. “Estamos definiendo las fechas para hacer estas jornadas ambientales y comunitarias”, apuntó García.