¡Pedaleando por los árboles patrimoniales del centro de Bogotá!
El Jardín Botánico de Bogotá y el Instituto Distrital de Recreación y Deporte lideraron un bicirecorrido por varias coberturas vegetales del centro de la capital.
Más de 15 personas conocieron los árboles patrimoniales del Parque Nacional y la Quinta de Bolívar, individuos arbóreos que han sido testigos de la historia de la ciudad.
Los participantes recorrieron cerca de 22 kilómetros en las bicicletas prestadas por el IDRD. Nueva crónica #BogotáReverdece.
Bogotá amaneció paramosa y fría. Una nube gris cubría los Cerros Orientales, el viento olía a lluvia y todo indicaba que en cuestión de minutos se iba a desatar un aguacero con granizo. Varios ciudadanos tenían sombrillas en sus manos.
El clima no fue un impedimento para que 17 personas llegarán a las ocho de la mañana a la plazoleta principal del Jardín Botánico de Bogotá (JBB). Sus prendas de vestir, como sudaderas, camisetas y chaquetas rompeviento, revelaban que iban a realizar una actividad deportiva.
El objetivo era participar en un bicirecorrido por varias de las coberturas vegetales del centro de la ciudad que albergan árboles patrimoniales, individuos arbóreos con edades avanzadas que han sido testigos de la historia de Bogotá.
Los ciudadanos miraban con angustia el cielo gris y encapotado. Ninguno estaba preparado para pedalear en medio de la lluvia y todos querían conocer la historia de algunos de los árboles longevos que han sido declarados como patrimoniales.
“Deberíamos soplar duro hacia el cielo para que las nubes desaparezcan”, dijo una de las participantes. La mayoría siguió su consejo y en cuestión de minutos el sol se manifestó en todo su esplendor.
El grupo cogió rumbo hacia la Unidad Deportiva El Salitre, ubicada al lado del JBB. Allí los esperaban varios funcionarios del Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD) con las bicicletas listas para la actividad deportiva y ambiental.
“El recorrido hasta el centro de la ciudad será de 11 kilómetros, un trayecto en el que vamos a pasar por sitios icónicos de la ciudad como los parques Nacional, Simón Bolívar, Independencia y Los Periodistas”, informó el IDRD.
Andrés Bustos, ingeniero ambiental del equipo de coberturas icónicas del JBB, indicó que se harían dos paradas en lugares que albergan varios árboles patrimoniales. “En el Parque Nacional y la Quinta de Bolívar vamos a dar unas charlas sobre estos individuos”.
¡A conocer el patrimonio arbóreo!
Antes de iniciar el bicirecorrido, los trabajadores del IDRD realizaron varios ejercicios de estiramiento y les enseñaron a los participantes las señales con las manos que se hacen en las pedaleadas por la ciudad.
“El puño cerrado hacia arriba indica que debemos parar. Si lo hacemos hacia la derecha o izquierda, significa girar hacia esas direcciones. Durante todo el recorrido, el personal del IDRD estará en el inicio y final de la línea de bicicletas”.
El bicirecorrido empezó por la ciclorruta de la Avenida 68 y luego giró hacia la calle 53. Es decir que los ciudadanos bordearon parte del Parque Simón Bolívar, uno de los 21 bosques urbanos de la ciudad que fueron declarados por el actual Plan de Ordenamiento Territorial (POT).
Los 17 ciclistas tomaron la carrera 30 hasta llegar al canal del río Arzobispo, un cuerpo de agua que cuenta con una ciclorruta en su ronda. La pedaleada pasó por el Park Way, otro bosque urbano, y siguió por una calle hasta el Parque Nacional.
En este ícono verde de la localidad de Santa Fe, los ciclistas tomaron un pequeño descanso y refrescaron sus gargantas. Luego, Yenny Rosas, profesional social del JBB, los reunió en forma círculo para que conocieran algunos detalles de la jornada.
“Estos bicirecorridos son una estrategia del equipo PIGA (Plan Institucional de Gestión Ambiental) y la Subdirección Técnica Operativa del JBB. Buscan que la ciudadanía conozca las coberturas vegetales de la capital, como los bosques urbanos y hoy los árboles patrimoniales”.
Andrés Bustos tomó la vocería para informar el objetivo de la actividad. “Queremos que las diferentes rutas turísticas que se realizan en la ciudad incluyan a los árboles patrimoniales y las coberturas vegetales icónicas”.
Según el ingeniero ambiental, en Bogotá hay 217 árboles que han sido declarados como patrimoniales, varios de ellos ubicados en las localidades del centro de la ciudad, como La Candelaria y Santa Fe.
“Estos árboles, declarados por instrumentos legales como las resoluciones 6971 y 814 y el Acuerdo 823, son longevos y cuentan con especial significado por temas relacionados con el paisajismo, la historia y las características propias de las especies vegetales”.
En el Parque Nacional, según explicó Bustos, se pueden observar varios árboles patrimoniales de diferentes especies, como caucho sabanero, guayacán de Manizales, falso pimiento, pino romerón, palma Fénix y olivo europeo.
Segunda parada
El bicirecorrido continuó por toda la ciclorruta de la Carrera 7, un cordón de cemento que conduce hacia el centro histórico de la ciudad. Este trayecto incluye sitios con árboles patrimoniales como el Parque de La Independencia y el centro comercial Terraza Pasteur.
Al llegar a la calle 13, los ciclistas tomaron el Eje Ambiental hacia los Cerros Orientales y pedalearon por el Parque de los Periodistas. La zona de alta pendiente que los llevaría a la Quinta de Bolívar, los hizo sudar.
La Quinta de Bolívar es uno de los sitios más históricos y emblemáticos de Bogotá. El Libertador Simón Bolívar fue su propietario durante 10 años, pero solo la habitó 423 días. La ocupó por primera vez en 1821, antes de partir a la campaña de la independencia de Venezuela.
“En 1828, Manuelita Sáenz llegó al lugar. Ella brindó apoyo incondicional al Libertador y su presencia transformó la Quinta en un lugar de fiestas y reuniones”, dice uno de los afiches de la Quinta.
Los 17 ciclistas, cansados por la pedaleada de 11 kilómetros y sudados por un sol picante, conocieron que este lugar de la localidad de La Candelaria es uno de los sitios de la capital que más alberga árboles patrimoniales.
“Cuenta con más de 20 árboles patrimoniales de especies como ciprés, cedro, sangregado, palma de cera, nogal y laurel. En la Quinta hemos realizado varias de las investigaciones del equipo de coberturas icónicas del JBB”, expresó Bustos.
El ingeniero ambiental informó que la Quinta de Bolívar fue el escenario base para empezar a desarrollar la actualización de los criterios metodológicos para la exaltación de los árboles patrimoniales de la ciudad.
“Todo empezó en 2004 cuando el profesor Eduardo Bermúdez hizo el primer diagnóstico de estos árboles en dos categorías: patrimoniales y de interés público. Muchos de ellos fueron identificados en el centro histórico y la Carrera 7”.
En 2011, a través de una resolución de la Secretaría de Ambiente y el JBB, se declararon más árboles patrimoniales en la ciudad, como las palmas de cera de las localidades de Chapinero y Teusaquillo y en la Carrera 7.
“Una resolución de 2020 incluyó más de estos árboles por su carácter patrimonial o interés público. En 2021, el nuevo equipo de coberturas icónicas del JBB empezó a investigar los contextos históricos, naturales o de representatividad paisajística y sociales de estos árboles”.
Balance
El primer bicirecorrido por los árboles patrimoniales del centro de la ciudad terminó hacia el mediodía. Los 17 participantes quedaron satisfechos por toda la información que recibieron en medio de la pedaleada.
Antes de volver a recorrer el trayecto de 11 kilómetros y regresar al punto de partida, es decir que en total pedalearon 22 kilómetros, Bustos realizó un balance de esta jornada ambiental, histórica y deportiva.
“Esta actividad nos permitió pasar por sitios icónicos que albergan árboles patrimoniales, como los parques Nacional, La Independencia, Central Bavaria y Los Periodistas; el centro comercial Plaza Pasteur; la Carrera 7; y la Quinta de Bolívar”.
En estos lugares, los ciudadanos observaron individuos arbóreos patrimoniales de especies como palma de cera (el árbol nacional), nogal (el árbol distrital), ciprés, eucalipto, palma Fénix y olivo europeo.
“A través de estos árboles podemos conocer el trazo de la historia y cómo evoluciona la comunidad a partir de un entorno paisajista entre el desarrollo urbano y natural”.