¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!

¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!

El grupo de Manejo Integral de Plagas y Enfermedades (MIPE) del Jardín Botánico de Bogotá realizó tratamientos fitosanitarios a dos especies arbóreas de este sector de la localidad de Teusaquillo.

Los 106 sangregados recibieron una aspersión foliar con inductores de resistencia, fertilizantes, un repelente con una base de ajo y ají y productos estimulantes.

A los 120 urapanes se les realizó una endoterapia, técnica que consiste en instalar dispositivos con un tratamiento previamente preparado alrededor del tronco.

El objetivo de esta “medicina” es que los árboles no se vean tan afectados por dos insectos que deterioran sus tejidos foliares. Nueva crónica #BogotáReverdece.

Los más de 400 árboles y arbustos de diferentes tamaños y formas que engalanan el Park Way, un separador vial de 800 metros lineales ubicado en el barrio La Soledad, lo convierten en uno de los sitios más verdes de Bogotá.

Caminar por la zona, una serpiente cubierta de hojarasca que zigzaguea por la mitad de la carrera 24 entre las calles 34 y 45, es sumergirse en un bosque urbano. Las copas de los árboles camuflan los rayos del sol y el aire se torna menos polucionado.

Aunque el verde marca la parada, en algunas épocas del año dos especies arbóreas palidecen por el accionar de unos insectos que se alimentan de su tejido foliar: los urapanes y los sangregados.

¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!
¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!

Drymoea veliterna, una polilla negra con manchas naranjas, afecta por temporadas las hojas del sangregado, un árbol que puede alcanzar hasta 20 metros de altura. En su estado inmaduro, las larvas mastican todo su follaje.

Entre tanto, las hojas del urapán, una especie foránea y de crecimiento rápido que fue introducida en Bogotá hace aproximadamente 70 años, palidecen por el chinche Tropidosteptes chapingoensis.

Para evitar que estas dos especies tengan afectaciones serias por la presencia de los insectos, el grupo de Manejo Integral de Plagas y Enfermedades (MIPE) del Jardín Botánico de Bogotá (JBB) les realiza varios tratamientos a lo largo del año.

Los sangregados reciben una aspersión foliar, una liberación o aplicación de una mezcla fitosanitaria a través de microgotas o nebulización.

Por su parte, a los urapanes se les hace una endoterapia, técnica que consiste en instalar pequeños dispositivos con un tratamiento previamente preparado alrededor del tronco.

¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!
¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!

Toma del Park Way

El pasado miércoles 23 de agosto, el cordón arbóreo del barrio La Soledad recibió pocos visitantes durante las primeras horas de la mañana. El número de deportistas y dueños de mascotas se podía contar con los dedos de ambas manos.

Días antes, profesionales sociales del Jardín Botánico les informaron a los residentes del sector que el grupo MIPE realizaría una jornada de intervención y les recomendaron no hacer actividades físicas ni sacar a pasear a los perros.

Gustavo Ardila, ingeniero de sanidad vegetal y coberturas verdes del JBB y su cuadrilla de seis operarios, llegaron a las seis de la mañana al Park Way para hacerles los tratamientos fitosanitarios a los sangregados y los urapanes.

Los primeros en pasar al tablero fueron los 106 sangregados de la zona, árboles que ya contaban con la presencia de la polilla Drymoea veliterna y sus larvas. Con mangueras conectadas a un tanque, los operarios realizaron la aspersión foliar.

“Para este tratamiento preparamos una mezcla con inductores de resistencia, fertilizantes foliares, un repelente con una base de ajo y ají y productos estimulantes. El objetivo de esta aspersión es fortalecer la parte foliar de los sangregados”, dijo Ardila.

Según el ingeniero agrónomo del JBB, esta es la segunda aspersión foliar que reciben los sangregados del Park Way este año. “Como evidenciamos poblaciones de Drymoea veliterna decidimos fortalecer el tratamiento para que las larvas no afecten tanto el follaje”.

Entre las seis y 10 de la mañana, el olor del ajo y ají del tratamiento gobernó los 800 metros lineales del Park Way, un aroma que llamó la atención de varios habitantes, transeúntes y comerciantes.

Yenny Rosas y Orlando Blandón, profesionales sociales del JBB, se encargaron de aclarar las dudas que tenía la comunidad. “Les recomendamos no transitar por el Park Way para evitar molestias en los ojos, aunque estos productos no afectan la salud”.

Medicina interna

Los seis equipos del grupo MIPE del Jardín Botánico, conformados por ingenieros y 36 operarios, se encargaron de realizar la endoterapia a los 120 urapanes del Park Way, la especie más representativa y antigua del sector.

A cada uno de los urapanes les fueron instalados alrededor del tronco en promedio 10 dispositivos, los cuales contenían una mezcla de insecticida, fertilizantes foliares e inductores de resistencia.

“La endoterapia es una técnica amigable porque no hay liberación de moléculas al ambiente. El tratamiento va por vía interna y es muy eficiente y rápido”, precisó Ardila.

¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!
¡Medicina para los sangregados y urapanes del Park Way!

Con este tratamiento, el ingeniero del grupo MIPE espera que los urapanes puedan resistir más las afectaciones causadas por el chinche Tropidosteptes chapingoensis en su tejido foliar.

“En aproximadamente dos meses volveremos al Park Way para ver si los tratamientos en los urapanes y sangregados fueron efectivos. Si evidenciamos afectaciones serias, reforzaremos las intervenciones”.